NASA y China guardan silencio sobre el 3I/ATLAS; Avi Loeb asegura que es una nave alienígena hostil
La llegada del objeto interestelar 3I/ATLAS ha generado una ola de incertidumbre mundial. Lo que comenzó como un fenómeno astronómico de rutina, hoy despierta teorías, sospechas y hasta temores, especialmente luego de que la NASA y el gobierno de China dejaran de compartir información sobre su paso cerca de Marte.
Según la agencia estadounidense, el 3I/ATLAS es un cometa interestelar detectado el pasado 1 de julio de 2025 por el sistema de sondeo ATLAS en Chile. Sin embargo, las actualizaciones oficiales fueron suspendidas justo antes del momento en que el objeto se aproximaría al planeta rojo, cuando se esperaba obtener imágenes más claras y datos definitivos.
La NASA explicó que la interrupción en sus reportes se debe a la falta de financiamiento y al cierre temporal del gobierno de Estados Unidos, aunque muchos consideran que la coincidencia temporal resulta, cuando menos, sospechosa.
China también deja de informar
Por su parte, China tampoco ha emitido ningún comunicado sobre el fenómeno, a pesar de contar con el robot Tianwen-1 orbitando Marte. De acuerdo con varios observadores, la ausencia de imágenes o reportes desde el país asiático ha incrementado el misterio.
Fotografías que desafían las explicaciones
Hasta el momento se conocen solo dos fotografías del 3I/ATLAS.
Una habría sido capturada por el rover Perseverance, en la que el objeto parece tener una forma cilíndrica y emitir su propia luz, algo que contradice la hipótesis de que se trata de un simple cometa.
La segunda imagen fue tomada por el astrónomo portugués Thiago Ferreira, quien registró una figura triangular.
El fenómeno se viralizó en redes sociales, donde incluso el influencer Carlos Name destacó el silencio de Elon Musk, quien no se ha pronunciado sobre el tema a pesar de su habitual interés por el espacio.

Avi Loeb insiste: “No es un cometa, es una nave hostil”
El reconocido físico y astrónomo Avi Loeb, de la Universidad de Harvard, sostiene que el 3I/ATLAS no es un cuerpo natural, sino una sonda alienígena hostil enviada por una civilización avanzada.
Entre los argumentos que presenta, menciona su trayectoria precisa, masa anómala, polarización extrema de la luz, composición química inusual y una estela no compatible con el hielo o el polvo cósmico.
Loeb incluso afirma que el objeto envía señales hacia la Tierra desde hace 48 años, lo que —según él— podría indicar un patrón de observación o reconocimiento.
Un visitante del tamaño de Manhattan
El 3I/ATLAS tendría una masa superior a los 20 mil millones de toneladas y un ancho de aproximadamente 5 kilómetros, similar al tamaño de Manhattan. Su detección se realizó mediante el Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides (ATLAS), operado con fondos de la NASA desde Chile.
Mientras las agencias espaciales guardan silencio, las teorías se multiplican. ¿Es realmente un cometa? ¿O estamos ante el primer contacto con una inteligencia extraterrestre?
Por ahora, solo queda esperar… y observar.