La senadora Anahí González Hernández presentó en el Senado de la República una reforma clave a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, la cual calificó como “un abrazo a las mujeres mexicanas” y un compromiso firme para no olvidarlas. “Las mujeres de México merecen vivir, soñar y contar con un país que las resguarde con toda su energía”, afirmó.
La propuesta busca que en todo el territorio nacional sea obligatorio reeducar a los agresores, transformando esta medida en un deber y no en una opción. La senadora destacó que, al lograr que un agresor cambie y comprenda el daño causado, “no solo protegemos a la mujer que hoy sufre a su lado, sino también a aquella que podría cruzarse en su camino mañana”.
González Hernández subrayó el respaldo de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha hecho de la lucha contra la violencia hacia las mujeres una prioridad personal. “Con su liderazgo, presenté esta reforma. Como presidenta, ella ha impulsado decretos que consagran en la Constitución el derecho a una vida sin violencia, ha fortalecido las fiscalías especializadas y lanzó la campaña ‘Es tiempo de mujeres sin violencia’, todo ello como parte de la revolución del bienestar que busca transformar la vida de las mexicanas. Los avances son claros: más agresores enfrentan la justicia y más mujeres reciben apoyo. Sin embargo, ella lo ha dicho con firmeza: no basta mientras una sola mujer siga sufriendo”, señaló.
La representante de Quintana Roo insistió en la urgencia de hacer obligatoria la reeducación de agresores en todo el país, especialmente en los diez estados donde aún no se aplica. “Queremos que esos hombres cambien y rompan el ciclo de dolor que se perpetúa. Con el compromiso de nuestra presidenta hemos dado pasos firmes, pero la lucha no termina”, concluyó.
