La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó que un escenario como el ocurrido recientemente en Chile —donde la derecha obtuvo la victoria en la elección presidencial— no se repetirá en el país, al asegurar que su gobierno mantiene un sólido respaldo popular, resultados sociales tangibles y unidad política.
Durante su conferencia matutina, la mandataria se refirió al triunfo del candidato conservador José Antonio Kast en Chile, señalando que se trató de una decisión democrática del pueblo chileno que debe respetarse, aunque reconoció que estos procesos obligan a una reflexión profunda de los movimientos progresistas en América Latina.
“Cada país tiene su propio contexto. Evidentemente queremos gobiernos cercanos al pueblo, pero siempre respetando la decisión democrática. En el caso de Chile, el pueblo decidió”, expresó Sheinbaum.
La presidenta subrayó que en México no se vislumbra un giro similar hacia la derecha, debido a tres factores clave: el respaldo mayoritario de la ciudadanía a su administración, el cumplimiento de los compromisos asumidos y los resultados sociales alcanzados.
“Esto no va a pasar en México porque estamos cumpliendo, no hemos traicionado al pueblo, hay resultados claros en la disminución de la pobreza y de las desigualdades, y la mayoría de las y los mexicanos está de acuerdo con la transformación que vive el país”, afirmó.
Sheinbaum agregó que la unidad del movimiento ha sido determinante para mantener el apoyo ciudadano, y advirtió que en otros países de la región, la fragmentación de los proyectos progresistas ha generado condiciones que favorecen el regreso de fuerzas conservadoras al poder.
Finalmente, sostuvo que la experiencia chilena debe ser analizada con respeto y autocrítica, pero insistió en que México atraviesa un momento político distinto, respaldado —dijo— por resultados concretos y un proyecto con base social sólida.
Felicitación a Chile y mensaje a Kast
Pese a sus diferencias ideológicas, la presidenta Sheinbaum felicitó públicamente al pueblo chileno y al presidente electo, a través de un mensaje difundido en redes sociales.
“Felicitamos al pueblo chileno por una jornada electoral pacífica y democrática. También a José Antonio Kast, próximo presidente de Chile. Confío en que ambos gobiernos seguiremos trabajando por el bien de nuestros países y de la región”, escribió.
Kast se impuso con 58.18 por ciento de los votos, frente al 41.82 por ciento de la candidata de izquierda Jeannette Jara, de acuerdo con datos preliminares del Servicio Electoral de Chile (Servel), con más del 99 por ciento de los sufragios escrutados.

El exdiputado ultracatólico, de 59 años, se convierte así en el primer pinochetista en llegar a La Moneda desde el retorno a la democracia, tras haber defendido la continuidad de Augusto Pinochet en el plebiscito de 1988.
Petro lanza dura advertencia
La victoria de Kast generó reacciones encontradas en la región. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, lamentó el resultado y advirtió que en América Latina “vienen los vientos de la muerte”, en una publicación difundida en la red social X.
“Por el sur y por el norte vienen los vientos de la muerte. Atenti (sic) grancolombianos, vienen por nosotros y debemos resistir con la espada de Bolívar en alto”, escribió Petro, junto a un mapa ideológico de América del Sur.
El mandatario colombiano, ubicado en las antípodas ideológicas de Kast, fue aún más contundente al afirmar: “El fascismo avanza… Triste que Pinochet tuvo que imponerse a la fuerza, pero más triste ahora es que los pueblos elijan su Pinochet”.
Nuevo mapa político en la región
Con fuertes vínculos con líderes de la ultraderecha regional, Kast ha prometido expulsiones masivas de migrantes, tipificar la migración como delito y construir cárceles de máxima seguridad con aislamiento total para líderes del narcotráfico.
Su triunfo coloca a Chile, junto con la Argentina de Javier Milei, en el polo de la ultraderecha del Cono Sur, en sintonía con gobiernos como los de Nayib Bukele en El Salvador, Daniel Noboa en Ecuador y Santiago Peña en Paraguay.
Mientras tanto, Sheinbaum reiteró que en el caso mexicano, la unidad del movimiento y los resultados sociales seguirán siendo el principal dique ante cualquier intento de retroceso político.












