El fósil de un antiguo reptil marino encontrado hace décadas en Alemania ha sido identificado como un nuevo género de animal prehistórico, según se detalla en un reciente estudio publicado en la revista PeerJ.
El ejemplar identificado pertenecía al grupo de los plesiosaurios, una criatura marina que vivió hace unos 183 millones de años. Entre sus características, medía más de tres metros de largo, tenía un cuello extremadamente alargado, era carnívoro y nadaba en los mares durante la era de los dinosaurios, en el periodo Jurásico.
Plesionectes longicollum, un excelente nadador
Estos reptiles marinos, que junto con los dinosaurios se extinguieron hace unos 66 millones de años, usaban sus cuatro extremidades en forma de aleta para nadar, motivo por el cual también se los conoce como “lagartos de remo”.
La especie fue bautizada como Plesionectes longicollum, que significaría algo como “nadador primitivo con cuello largo”.
“Como todos los plesiosaurios, era un excelente nadador y probablemente se alimentaba principalmente de peces”, explica el coautor Sven Sachs, del Museo de Historia Natural de Bielefeld.
El fósil del reptil marino fue descubierto en 1978 en Holzmaden, una reconocida zona de fósiles situada a unos 35 kilómetros al sureste de Stuttgart, en el Estado federado de Baden-Wurtemberg. Desde entonces, ha permanecido en la colección científica del Museo Estatal de Historia Natural de Stuttgart.
El esqueleto bien conservado mide 295 centímetros, de los cuales 125 corresponden al cuello y 81 a la cola.
“Está algo comprimido y el cráneo no está completo. Estimamos que el animal en vida habría alcanzado los 3,5 metros de longitud”, añade Sachs.
Un nuevo género de animal prehistórico
Aunque el fósil ya había sido estudiado anteriormente, otros científicos lo habían considerado demasiado joven como para asignarle una especie definida. No obstante, el nuevo análisis reveló una combinación inusual de características óseas que lo distingue claramente de otros plesiosaurios conocidos.
“Nuestra investigación justifica su clasificación no solo como una nueva especie, sino incluso como un nuevo género”, asegura Sachs.
“En los últimos años, ha habido avances en la comprensión del crecimiento óseo en plesiosaurios, lo que permite una mejor evaluación de qué rasgos anatómicos son estables y útiles para diferenciar especies”, agrega el experto.
Una pieza más del rompecabezas evolutivo del Jurásico
En la zona de Holzmaden ya se han desenterrado los fósiles de al menos cinco especies diferentes de plesiosaurios.
“Este descubrimiento añade una pieza más al rompecabezas de la historia evolutiva de los ecosistemas marinos durante una etapa crucial de la historia de la Tierra”, concluye el coautor Daniel Madzia, de la Academia Polaca de Ciencias.
Con información de DPA, DW y EFE