Finalmente ya arrancó la pretemporada 2023 de F1 y, en la primera mañana de test, quedó una imagen similar a la del 2022, con Red Bull Racing y Max Verstappen siendo los más rápidos y, además, uno de los más activos, con 71 vueltas. El holandés pasó gran parte de la mañana en la segunda posición detrás de Carlos Sainz Jr., pero a falta de 38 minutos dio un paso al frente para meter al español casi tres décimas y ponerse al frente.
Red Bull hizo varios cambios de configuración y dejó el 1:32.959 con neumáticos medios como tiempo a batir, como único equipo que bajó del 1:33. Detrás de él, también sin problemas y con muchas vueltas (72, el segundo que más), Sainz fue rápido desde el principio y se fue alternando en el primer lugar con el campeón.
Así el Ferrari SF-23 también sorprendió por varias razones. El coche sufre porpoising, ese efecto rebote que afectó a muchos en 2022 y que la FIA quiso atajar cambiando el reglamento del suelo de los coches. Además Sergio “Checo” Pérez, el piloto mexicano está presente pero solo está viéndolo ve desde el box y no salió a pista.
El equipo Aston Martin con el piloto Fernando Alonso empezó con problemas; su compañero improvisado, Felipe Drugovich (brasileño-italiano de ascendencia austriaca) sustituye al lesionado Lance Stroll, con un auto que se quedó tirado nada más salir a pista, y encendió todas las alarmas. Después de una hora de trabajo en el box, el equipo informó de que se trataba de un problema electrónico que había sido resuelto, pero eso no impidió que fueran el equipo con menor número de vueltas en la sesión matinal, 40. Sin embargo, gracias sobre todo a una última hora y media con mucho trabajo, se quedó a solo seis de las 46 vueltas Tsunoda con AlphaTauri, que no informó de ningún problema de fiabilidad pero estuvo mucho tiempo en el garaje.
El brasileño ocupó la última posición de la tabla de tiempos con el Aston Martin durante casi toda la mañana, pero a falta de diez minutos mejoró su marca y acabó séptimo. Pero eso no debe llevar a juicios precipitados, ya que es un piloto casi novato cuyo único bagaje en F1 es haber disputado la FP1 del GP de Abu Dhabi 2022 y los test postemporada en el mismo circuito.
Detrás de los dos primeros acabó un Alex Albon que sorprendió con el Williams, no solo por su tercer mejor tiempo, sino por ser muy regular y también muy fiable, siendo el equipo que más kilómetros hizo, con 74 vueltas. Además, Albon fue uno de los pilotos que apareció por la primera posición en la primera hora, antes de ser superado finalmente por los dos más rápidos. Cuarto fue Zhou con el Alfa Romeo, compañero de Valtteri Bottas, y Russell dejó el Mercedes quinto, sin problemas y también superando las 65 vueltas.
El inglés fue el primer piloto en salir a pista, colocándose al final del pitlane esperando semáforo verde minutos antes de las ocho de la mañana, e hizo lo propio cuando la sesión se reanudó después de la bandera roja que provocó el Aston Martin averiado de Drugovich en los primeros instantes. Una pausa, esa del Aston, que duró más de lo esperado, y es que los comisarios tardaron casi media hora en retirar el monoplaza, subirlo a la grúa y llevarlo de vuelta al box.
Esa fue la única interrupción de una mañana muy activa y sin mayores problemas que alguna ligera salida de pista o los clásicos bloqueos de neumáticos, especialmente de un Haas bastante nervioso que, junto a la inactividad de Nico Hulkenberg, dejó varias veces esa imagen de humo saliendo de las gomas en una frenada. El alemán, que tres años después vuelve a ser titular, se quedó la sexta posición, entre Russell y Drugovich.
En general fue una mañana de muchas pruebas, y sobre todo en las primeras horas vimos multitud de parrillas aerodinámicas en los coches.
Pierre Gasly, con un Alpine azul -que será color rosa en las tres primeras carreras-, acabó noveno por detrás de Tsunoda y solo por delante de un Oscar Piastri que llega este año a la Fórmula 1 después de la polémica con su contrato el pasado verano y con el que McLaren buscó una y otra vez cambios para hacer más rápido su su monoplaza.
