Las gorras de béisbol rojas se han convertido en uno de los símbolos del presidente, Donald Trump, pero la primera dama Melania Trump envió su propio mensaje de la moda en lo que a sombrero se refiere, al lucir uno azul marino de ala ancha de un diseñador estadounidense el día de la toma de posesión y que se volvió viral.
El sombrero diseñado por Eric Javits protegía los ojos de la primera dama mientras su esposo juraba el cargo este lunes por segunda vez. Javits afirmó que vestir a la primera dama ha sido uno de los mayores honores de su carrera.
“Mi formación artística me ha permitido aportar armonía y equilibrio al rostro creando sombreros con formas que favorecen y realzan todo tipo de rostros”, afirmó Javits en un comunicado. “En este caso concreto, no fue difícil, ya que la sra. Trump está dotada de una gran estructura ósea, belleza y un maravilloso sentido del estilo”.
El sombrero dejó su huella durante toda la ceremonia de investidura: cuando Trump fue a besar a su esposa tras entrar en la Rotonda del Capitolio, la pieza sólo dejó espacio para un beso al aire. Incluso el ahora ex presidente Joe Biden tuvo que sortear el sombrero mientras intentaba hablar con Trump quien estaba al otro lado.
Trump, quien habló en el Salón de la Emancipación tras la ceremonia de investidura, bromeó sobre el sombrero de su esposa, que estuvo a punto de volar por los aires. La primera dama se había agarrado al sombrero mientras un helicóptero militar que despegaba con Biden generaba viento.
“Casi sale volando”, dijo Trump entre risas. “La estaba levantando en peso”.
Alejándose del vestido y los guantes de cachemira azul cielo de Ralph Lauren de 2017, esta vez Melania Trump combinó un apagado abrigo de lana de seda azul marino con una falda azul marino y una blusa de crepé de seda marfil por debajo, todo del diseñador independiente estadounidense Adam Lippes.
“La tradición de la investidura presidencial encarna la belleza de la democracia estadounidense y hoy hemos tenido el honor de vestir a nuestra primera dama, la sra. Melania Trump”, declaró Lippes en un comunicado. “El atuendo de la señora Trump ha sido creado por algunos de los mejores artistas de Estados Unidos y me enorgullece enormemente mostrar este trabajo al mundo”.

Su primer atuendo para la toma de posesión suscitó comparaciones con el estilo de Jacqueline Kennedy. Kennedy también lució un famoso sombrero pastillero en la toma de posesión de su esposo en 1961. Pero vestir a la primera dama se convirtió en un punto de controversia política en 2017, cuando algunos diseñadores dijeron que no vestirían a la primera dama entrante, normalmente una oportunidad codiciada. Algunos usuarios de las redes sociales presionaron para boicotear a Ralph Lauren en ese momento.
En 2025, Ralph Lauren fue el diseñador elegido por la primera dama saliente, Jill Biden, quien escogió al diseñador para su imagen de despedida. Optó por un monocromático color púrpura, desde su abrigo hasta sus zapatos y guantes, para marcar la transición de poder.