El diseñador de autos más influyente y triunfador de la Fórmula 1, Adrian Newey, firmó con Aston Martin y se unirá en marzo de 2025 después de dejar Red Bull, poniendo fin a meses de especulaciones y asumirá el próximo año el papel de Socio Director Técnico, además de convertirse en accionista.
Newey pasó casi dos décadas con el equipo austriaco y se le atribuye ampliamente el mérito de haber puesto al equipo en su camino hacia el dominio en la Fórmula 1. Este martes 10 de septiembre de 2024, Aston Martin confirmó que se unirá a un equipo que tiene grandes ambiciones de competir por el título y el respaldo del multimillonario Lawrence Stroll, pero que aún no ha ganado ninguna carrera.
Newey llegará a su nuevo rol como “socio técnico gerente” a tiempo para ayudar a dar forma a cómo responde Aston Martin a las nuevas regulaciones de los autos de F1 que llegarán para 2026. También se convertirá en accionista del equipo.
Newey dijo que él y Stroll se conocieron mientras entrenaban en el gimnasio durante los fines de semana de carreras de F1 en Asia. Newey visitó la nueva sede de Aston Martin en junio mientras Stroll se acercaba a un fichaje que el multimillonario canadiense calificó como “otra demostración de nuestra ambición de construir un equipo de Fórmula 1 capaz de luchar por campeonatos mundiales”.
“Tienes que ser honesto contigo mismo y mantenerte fresco, por eso sentí que necesitaba un nuevo desafío”, dijo Newey.
Newey se unió a Red Bull en 2006 y ayudó al equipo a ganar siete títulos de pilotos, incluidas las últimas tres temporadas con Verstappen, y seis títulos de constructores.
Red Bull dijo en mayo que su director técnico se alejaría del diseño de la F1 y se centraría en un coche de producción, el RB17, antes de marcharse en el primer trimestre de 2025.
El anuncio se produce antes del Gran Premio de Azerbaiyán de esta semana, y en un momento en el que el dominio de Red Bull en la F1 parece estar decayendo.
La partida de Newey también es parte de un éxodo más amplio del personal directivo de Red Bull en una temporada que comenzó en medio de una agitación legal cuando el director del equipo, Christian Horner, fue acusado de mala conducta por parte de un empleado. La empresa matriz de Red Bull desestimó la denuncia contra Horner y el mes pasado se desestimó una apelación.
