En un derroche de alegría, suspiros y creatividad se convirtió la llegada de las 17 representantes municipales, al hotel sede donde por siete días, recibirán capacitación para participar en la preferia y Feria Tabasco 2025; arribo que se vivió como una gran fiesta pletórica de música local, ejecutada por decenas de grupos de tamborileros, sumado al calor humano que cada de las bellezas del Edén imprimió a sus cortejos.
La algarabía comenzó a las 9:40 de la mañana, con un sol de 27 grados y el arribo de la Flor Tabasco 2024, Constanza María Garza Herrera, flanqueada por su padre, don Alfonso García. Tanto ella, como el Impala descapotable del que descendió, arrancaron los primeros suspiros y admiración.
Precedida por su numerosa porra, que ondeaba banderines de color rosa y amarillo, y coreaba a una sola voz “sí se puede, sí se puede”, se presentó la representante del pueblo yokot’an, la nacajuquense Sharys Karyme Pérez Gutiérrez. Iba con un vestido verde que traía ya integrada una auténtica tira bordada.
Quien sorprendió al hacer su arribo, fue la representante de Centro, Alejandra Mier y Terán Gómez, al bajar nada menos que del Villabus, junto a su padre y la estruendosa porra que viajó con ella. Una de sus fans que vino apoyarla era su abuela, doña Matilde Solís de la Cruz, de 88 años de edad.
El rosa mexicano fue el color favorito de algunas representantes en este día. Yadira de la Cruz Torres, de Cunduacán, sería la primera en lucirlo frente a los medios de comunicación.
Por momentos parecía también una competencia de tamborileros. La representante de Cárdenas, Nayeli Dominique Domínguez García, se hizo acompañar por los 12 miembros de la agrupación Oros del Sureste, cuya música no dejó de bailar una botarga en forma de dinosaurio. Tienen un lustro apoyando a su municipio en este evento y ahora incluyeron al “dino”, dijeron, para llamar la atención.
Y mientras su representante, Nayeli Dominique, esperaba también su turno, saludó a los que estaban cerca, entre ellos un fiel seguidor de 88 años que le pidió una foto: Don Luis, su abuelo. “Agradezco con todo mi corazón azucarero el apoyo, vamos por la cuarta Flor de Oro”, afirmó.
Arengando “corazón de cacao, corazón de cacao”, la porra de la representante de Comalcalco, Bianca Chargoy Barajas, abrió la plaza mientras los tamborileros ponían el ambiente. Su padre, don Julián Chargoy, cerca de ella, declaró entusiasmado su amor por Tabasco, sus tradiciones y gente. “Gracias a la porra. Aquí tenemos embajadora”, dijo.
Al grito de “Jalpa quiere flor, Jalpa quiere flor”, lanzado por su estruendoso contingente, apareció Rosa Marlene Peralta Leyva, ataviada con un vestido rojo.
A la representante de Jalapa, Gloria Stephania Ramos Pérez, le sucedió lo mismo que a la de Cárdenas, tuvo que esperar un poco, pero aprovechó el tiempo para dialogar con su gente. “La familia es lo más importante para mí”, dijo. A unos pasos estaba su tía, Ángela Ramos, auxiliándola en todo lo que necesitara.
Ni el elegante Rolls Royce en que se acercó la de Nacajuca, ni el deportivo Corvette en que apareció la de Comalcalco, pudieron superar la alegría que causó la carreta jalada por la yegua Shugar y el caballo Rompope donde venía sentada y saludando a todos la representante de Jonuta, Ingrid Lizzet Casanova Granadillo. Su tío, el jinete José, reveló que la idea del arribo fue de toda la familia.
La representante de Huimanguillo, Ariana Carmina Valencia Martínez llegó en un vehículo oficial del Ayuntamiento de su municipio, y fue la única que estuvo acompañada por la autoridad municipal, la alcaldesa Mari Luz Velázquez Jiménez. Entre la porra venía doña Inés Gómez de 75 años de edad, con un brazo delgadito como carrizo pero de una fuerza sorprendente para sonar la matraca.
La representante de Macuspana, Vania Judit Rodríguez Ocaña, venía atrás de la caravana, en un admirable Thunderbid 1956, de dos plazas, descapotable, saludando de mano a sus seguidores y tomándose la foto con quien se lo pedía. Su vestido al recorrer el camino desde la fuente hacia la entrada del hotel era de color rosa pálido y una blusa blanca manga larga.
Una de las delicias de los niños fue la caravana de Martha Johanna García Cruz, de Tacotalpa, que traía entre la porra a un par de muñecos gigantescos, dos choquitos con sus trajes típicos que salieron muy bailadores. Las figuras fueron diseñadas por la Casa López, casa de artesanos de Tacotalpa.
Después de que arribó la representante de Paraíso, Aylín Pérez Oyosa, entró la de Centla, Aranza Monserrat García León con una de las porras más animadas de la pasarela. Don Natividad García López, orgullosamente nacido en Chilapa, Centla, recordó las elecciones de su tiempo y dijo que, en este caso, el pasado no fue mejor. “Todo está cambiado, diferente a lo de antes y a lo de ahorita por eso ahora es más bonito, se ha ido agrandando nuestra capital y hay más bulla, más jolgorio, más algarabía”.
No tardaron en pasar el resto de las Bellezas del Edén: de Emiliano Zapata, Frida Sofía Fields Sánchez; de Tenosique, Corazón de Jesús Ramírez Jasso; de Teapa, Ximena Osorio Chávez y de Balancán, María Fernanda Palma Miramontes. Todas fueron ayudadas a descender de sus unidades por el servidor público Cristiano Hernández Hurtado. El más “rayado” afirmó que “todas son representantes de la belleza de nuestro pueblo. Son las bellezas de este Edén”.
